Daniel González Dueñas atribuye a Georges Méliès la creación del cine - no del cinematógrafo, no de la máquina, no... Méliès sería, es, quien logró la transformación del registro objetivo de la realidad en magia, en ficción, en exploración del asombro, de la imaginación, y de sus posibilidades.
E, indeed, Méliès era mago de profesión.
A su salud!
De la siguiente pequeña joya, sugiero, vayan al minuto 2:55.
¡Les va a gustar! (jiji)
Y, por supuesto, la obra maestra.
(Escena conocidísima hacia minuto 3:45)
¿El secreto? Todo está en la mirada, según mi querido (aunque nunca conocido) González Dueñas.
A su salud también, y a su maravilloso Méliès, el alquimista de la luz. Ampliamente recomendado, un verdadero gusto y delicia (editado por CONACULTA, si no me equivoco).
Bon apetite!